El Impuesto de Sucesiones es uno de los tributos que se deben abonar en España tras la transmisión de bienes entre fallecidos y herederos. Aunque existe una armonización fiscal en el territorio español, cada comunidad autónoma tiene su propia normativa fiscal. En el caso de Canarias, este impuesto presenta algunas particularidades. A continuación, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre el Impuesto de Sucesiones en Canarias y cómo gestionarlo.
¿Qué es el Impuesto de Sucesiones?
El Impuesto de Sucesiones es un impuesto directo que grava el patrimonio que recibe una persona a través de una herencia, legado o donación. Depende de la cantidad y del parentesco, así como de las normativas fiscales de cada comunidad autónoma. Este impuesto se debe pagar en un plazo determinado de tiempo, por lo que es importante conocer los aspectos clave para poder gestionar correctamente este trámite.
El Impuesto de Sucesiones en Canarias
Canarias es una comunidad autónoma con una normativa fiscal propia. El Impuesto de Sucesiones en esta comunidad está regulado por la Ley 22/2009, de 18 de diciembre, por la que se regula el sistema de financiación de la Comunidad Autónoma de Canarias.
La principal particularidad del Impuesto de Sucesiones en Canarias es que existe una bonificación del 99% del valor de los bienes heredados. Sin embargo, esta bonificación no es automática, sino que es necesario cumplir con una serie de requisitos establecidos por la normativa fiscal de la comunidad.
Requisitos para la bonificación del 99%
Para poder optar a la bonificación del 99% en el Impuesto de Sucesiones en Canarias, se deben cumplir los siguientes requisitos:
- Que la persona fallecida haya residido en Canarias al menos durante los 5 años anteriores al fallecimiento.
- Que el heredero resida en Canarias.
- Que el valor de los bienes y derechos transmitidos no supere los 1.000.000 de euros.
- Que el heredero no disponga en ese momento de un patrimonio superior a los 500.000 euros.
Cómo gestionar el Impuesto de Sucesiones en Canarias
El Impuesto de Sucesiones se gestiona a través de una declaración tributaria, que debe presentarse en la Agencia Tributaria de Canarias en un plazo máximo de 6 meses desde el fallecimiento del titular de los bienes. En caso de no cumplir con este plazo, se pueden aplicar recargos e intereses por demora.
Es importante contar con asesoramiento especializado en materia fiscal para poder cumplir correctamente con los trámites necesarios para la gestión del Impuesto de Sucesiones en Canarias, sobre todo si se quieren optar a las bonificaciones establecidas en la normativa fiscal de la comunidad.
Conclusión
El Impuesto de Sucesiones en Canarias presenta una particularidad en cuanto a la bonificación establecida en la normativa fiscal de la comunidad. Es importante conocer los requisitos para poder optar a ella, así como los plazos y trámites necesarios para su correcta gestión. Contar con asesoramiento especializado puede ser una buena opción para evitar problemas y cumplir adecuadamente con las obligaciones fiscales.